Un 8 de abril de 1979 bajo el liderazgo de los sacerdotes Pedro Kliegel y Vicente Gottschalk habitantes de un campamento de la ciudad de Osorno, en la X Región de Los Lagos, iniciaron su trabajo para construir con sus propias manos la Población San Maximiliano Kolbe, como un modelo de autoconstrucción desde la autogestión en búsqueda de una vida con oportunidades.
Por ello el 1 de abril del 2019 la comunidad de San Maximiliano Kolbe se congrego junto con las autoridades de la Municipalidad de Osorno, Alcalde Jaime Alberto Bertín Valenzuela, Concejales, el Consejero Regional Francisco Reyes Casto, directivos del Colegio Artístico Santa Cecilia, estudiantes, la Junta de Vecinos y un gran número de participantes de la comunidad para inaugurar el Memorial en agradecimiento a los padres Pedro Kliegel, Vicente Gottschalk, y al Santo Maximiliano Kolbe – Sacerdote polaco asesinado por los nazis en el campo de concentración Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial- .
También se hizo un reconocimiento a distintos personajes emblemáticos de esta comunidad como la señora Marina Gallardo, quien fue fundadora y presidenta en 1980 del grupo de Bienestar. La señora Gallardo resinificó el trabajo y el aporte de las mujeres en el proceso de construcción de la comunidad, su aporte fue significativo porque logro desde el trabajo comunitario de las mujeres la gestión de recursos económicos para seguir aportando a esta gran obra.
En palabras de Padre Pedro Kliegel presidente de la Fundación Cristo Joven, “el trabajo realizado en la Kolbe 40 años atrás es el significado de la verdadera Democracia”.
Lorena Mancilla, tenía 9 años cuando sus padres se inscribieron en el proyecto, les entregaron la casa en 1983 y se siente agradecida por la visión que tenían los sacerdotes porque esa visión les abrió el pensamiento y les sembró la creencia, “siempre podemos hacer otras cosas más” dice ella, “trabajamos todos por el bien común, éramos iguales y aprendimos a trabajar en comunidad” “Gracias a esta oportunidad de tener una vivienda digna, nuestros hijos pensaron entonces en hacer cosas que años atrás eran impensables para quienes vivíamos en campamentos, como ir a la universidad.”
El acto cerró con reconocimientos y la participación del grupo de estudiantes de Marimbas y Tambores del Colegio Artístico Santa Cecilia, quienes integraron dentro de su repertorio las melodías de la Pollera Colorá, una composición de origen colombiano. Paso siguiente se dio la entrega del proyecto de restauración de la sede de la Junta de Vecinos y un emotivo compartir. Con este acto la comunidad de Maximiliano Kolbe se proyecta como una gran familia que puede seguir el legado de sus padres fundadores.